Carta de lectores

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Mientras espero que se haga la hora de ir a buscar a mis hijas a una fiesta, les comparto una carta de lectores que escribió mi cuñada, y que publicaron el la edicion online del Diario La Naciónm el viernes pasado..


Muertes accidentales
Viernes 11 de enero de 2008 17:11

Me ha quedado paralizado el corazón luego de enterarme de que un sobrino salvó milagrosamente su vida esta mañana en un accidente de tránsito. Probablemente la ayuda divina, su juventud y sus buenos reflejos, hicieron que pudiera esquivar un camión conducido por un pobre obrero del volante dormido que se cambió de carril y se le vino de frente.

Soy una más de los habitantes de esta república que todos los días lee o escucha la cuenta de los nuevos muertos, inválidos, malheridos en nuestras rutas y ciudades suicidas. Nada puedo hacer, más que escribir para desahogar mis penas.

Nuestros eméritos gobernantes, los de ahora y los que ya se fueron, no parecen tener vocación ni la menor idea de cómo hacer para remediar este flagelo terrible. Destruyeron los ferrocarriles engrosando pantagruélicamente la flota de camiones que transitan diariamente por angostos senderos asesinos. Se preocupan más por conflictos internos de otros países, en vez de ser "garantes" de los millones de rehenes que sin posibilidad de elegir otro destino, salimos a la calle a arriesgar la vida cada mañana.

Un líder de los camioneros, lucha por defender puestos de trabajo de los afiliados a su gremio, cuando tal vez sería mejor que dejara que fueran despedidos porque así seguramente permanecerán más tiempo junto a sus seres queridos.

Nos quejamos por la delincuencia y la inseguridad, tema muy importante no lo niego, pero quizás si hacemos la cuenta, son más los muertos en accidentes que aquellos que pierden la vida a diario en el "far west" argentino.

A los policías dedicados a vigilar el comportamiento de quienes vamos al frente de un volante, solamente los conocemos por televisión, en alguna película de Hollywood o cuando nuestros dirigentes deciden recaudar un plus porque no llegan a juntar para el aguinaldo de los empleados públicos.

Lloramos por los miles de desaparecidos de la dictadura y no nos damos cuenta de que día a día hay nuevos desaparecidos, retorcidos entre hierros deformes. Estos al menos tendrán tumbas con nombre y apellido aunque creo, también son crímenes de lesa humanidad como los otros, provocados por un estado "organizado" que los provoca en lugar de evitarlos, por gobernantes que deberían saber guiar, educar, conducir a su pueblo hacia una vida digna, medianamente segura y no hacia una muerte "accidental".

A.M.G.M.
La carta en el diario

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